España logra en la reforma de la Política Agraria Común (PAC) la práctica totalidad de sus reivindicaciones
Mantiene el presupuesto del fondo comunitario.
Cofinanciación a políticas verdes: con un total de 50.000 millones.
Ayudas flexibles: las ayudas se adaptarán a la realidad productiva de España, en lugar de limitarse a una tasa plana.
Apoyo al desarrollo rural: podrán coexistir programas nacionales y regionales, así como las medidas relacionadas con las inversiones en regadío.
Este acuerdo corrige la propuesta inicial de la Comisión y adapta la reforma de la PAC a la realidad de la agricultura española.
Las nuevas condiciones permitirán al sector mejorar su actividad económica para generar crecimiento y empleo.
Nuestro sector agroalimentario representa el 8% del PIB gracias al trabajo de 1,8 millones de trabajadores.