1/10/10

Renovar el certificado de idoneidad para poder adoptar menores costará 800 euros

No sé de que nos sorprendemos ya, pero esto se llama lucrarse de la desesperación de muchas familias que llevan años y años esperando poder adoptar a un niño/a. ¿Quien no conoce a una de estas familias? Lo mal que lo pasan por el tiempo, las incertidumbres, pero ahora además les costará adoptar mucho más dinero, este el bienestar del que habla el PSOE. Cuando debería ser al revés, estas familias que han dado ese paso de solidaridad deberían ser recompensadas por todos los años que se pegan luchando para poder dar ese cariño a esos niños, que en muchos casos están indefensos.


La renovación de los certificados de idoneidad de las familias para adoptar a un menor dejará de ser gratuita y pasará a costar unos 800 euros. Así informó ayer Europa Press en referencia a una serie de modificaciones en los servicios de adopción de la comunidad andaluza, introducidas por la Consejería para la Igualdad y el Bienestar Social.

Según fuentes de la Junta de Andalucía, hasta la fecha, la renovación de estos certificados, que tiene que producirse a los tres años o bien cuando existan en las familias acontecimientos que puedan modificar su idoneidad, la realizaba la Administración de forma gratuita, aspecto que será modificado para comenzar a ser retribuido por una cantidad de 802 euros. No obstante, estas mismas fuentes precisaron que la expedición por primera vez de este certificado sigue siendo gratuita y la llevan a cabo equipos técnicos de psicólogos y trabajadores sociales del Servicio de Protección de Menores o autorizados por la Consejería.

Con este certificado se pretende garantizar la aptitud de las personas solicitantes para cubrir las necesidades del menor, cumplir las obligaciones establecidas legalmente y ofrecer estabilidad, afecto y cuidado. Para la valoración de idoneidad se realizan entrevistas, además de, al menos, una visita al domicilio de los solicitantes.

Otro de los cambios afecta a los informes de seguimiento tras la adopción internacional y que las familias deben remitir a los países de procedencia de los menores cada año. Estos informes, que costaban unos 160 euros, aumentarán de precio más de un 60% hasta situarse en los 268 euros.