El Interventor General remitió el documento que detectaba las irregularidades a la viceconsejera Aguayo, hoy consejera de Hacienda, pero mandata que se diese "conocimiento y traslado al consejero de Economía" entonces José Antonio Griñán.
Arenas, a Griñán: "le quedan dos salidas: o presentar su dimisión, o el cese de la consejera por haber ocultado el Informe".
El Parlamento ha sido hoy el escenario en el que se han destapado definitivamente las mentiras de la Junta de Andalucía en torno a la trama de los Expedientes de Regulación de Empleo. Durante la sesión de control al gobierno el presidente del PP andaluz. Javier Arenas, advertía al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, que "es imposible e ilegal que su viceconsejera, hoy consejera (de Hacienda), no le trasladara informes que afectan a varios cientos de millones de euros. Si se demuestra que la Consejería recibió los Informes de Intervención para hacérselos llegar a usted le quedan dos salidas: o presentar su dimisión o el cese de la consejera por haber ocultado el Informe". Griñán escuchaba las palabras del líder del PP enrocado en su postura de "desconocimiento" de esos Informes que detectaron desde el año 2005 irregularidades en los Expedientes de Regulación de Empleo subvencionados por la Junta de Andalucía.
Sin embargo, fuera ya del Salón de Plenos, el secretario general del PP andaluz, Antonio Sanz, tiraba por tierra el único argumento que le quedaba ya al presidente Griñán al hacer público un documento, que no es otro que el Informe de la Intervención General, cuya destinataria era la viceconsejera de Economía, por entonces Carmen Martínez Aguayo.
En la comunicación aparece la nota "para su conocimiento y traslado al consejero de Economía y Hacienda" y se añade que se adjunta y remite "informe definitivo de cumplimiento" correspondiente al ejercicio 2004 realizado por la Agencia IDEA -que suplió al Instituto de Fomento de Andalucía (IFA)- de conformidad con lo recogido en la ley de Hacienda Pública sobre régimen presupuestario, financiero, de control y contable de las empresas de la Junta de Andalucía.
A juicio de Sanz "este documento responsabiliza al máximo nivel de la Junta de Andalucía, por eso a Griñán no le cabe otra salida hoy que la dimisión o la dimisión".
Javier Arenas recordó que los informes de la Intervención General que debía de tener Griñán "decían que se habían superado los créditos; que se hacían transferencias al margen de la legalidad para gastos de explotación; que no había controles ni a priori ni a posteriori; que se estaba gastando sin procedimiento administrativo alguno, y a partir de esos Informes es cuando surgen las gravísimas responsabilidades políticas para usted y Chaves" dijo el presidente del PP a Griñán en su pregunta.
Además, volvió a hacer hincapié en que "si hubiera actuado cuando conoció los Informes de Intervención hace cinco años nos hubiéramos evitado el escándalo. Usted conoció, no evitó, permitió y autorizó que los procedimientos al margen de la Ley siguieran campando", declaró.
"Le acuso de haber hecho caso omiso de los informes de la Intervención General, que lo conoció, le fue enviado a la viceconsejera para que se entregara a usted; le acuso de haber mentido, de haber incumplido la Ley de Hacienda Pública, la Ley de Subvenciones; de haber permitido que se gastara más de lo autorizado, de no haber puesto en marcha controles ni a priori ni a posteriori de los fondos, de haber permitido y autorizado un modo de gasto al margen de cualquier procedimiento administrativo. Han permitido que determinadas empresas reciban ayudas al margen de las centenares de miles que estaban desapareciendo; le acuso de mentir cuando afirmó en sede parlamentaria que en ningún momento se habían elevado diligencias al consejero, estaba mintiendo, los informes definitivos de la intervención van al consejero. Desmienta que no es verdad. Si demostramos que es verdad que los recibió o se los envió a usted tendrá que dimitir por haber mentido en el Parlamento o tendrá que cesar a la consejera", concluyó el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, quien espetó a Griñán que su gobierno ha perdido ya "toda la credibilidad".
